¿En qué se parecen el casino y la bolsa?
Para algunos, especialmente para los no iniciados, la bolsa es como un gran casino online en el que los juegos son las distintas empresas y la cuota de ganancia la posibilidad de que sus acciones suban o bajen. Pero ¿es cierto que los juegos de casino y el mercado de valores se parecen tanto? Vamos a intentar arrojar un poco de luz sobre el asunto en las siguientes líneas.
Lo que los casinos y la bolsa tienen en común
Veamos la situación con cierta distancia. Tienes en tus manos una pequeña cantidad de dinero que has conseguido de golpe y quieres tentar a la fortuna para hacer que crezca sin que importe mucho que llegue a desaparecer.
En esta situación, los juegos de casino o la bolsa tienen mucho parecido. Es decir, puedes comprar algunas acciones de una compañía por una corazonada o seguir tu instinto y apostar en la ruleta online por un número concreto.
Pero, además del componente de azar que hay en ambos casos, ¿sabes lo que de verdad tienen en común? La incertidumbre, la emoción y el golpe de adrenalina que tendrás tanto a la hora de comprobar que la empresa sube como la espuma como al verificar que tu apuesta deportiva se ha cumplido como pronosticaste.
Lo que queremos decirte con esto último es que la psicología del jugador de casino ocasional y la del inversor puntual son muy parecidas y tienen una recompensa bastante similar. Si te pones siempre en esta situación, la de no ser un profesional en ninguno de los dos mundos que estamos valorando, entonces sí que vas a encontrar similitudes entre el casino online y la bolsa.
Diferencias entre el casino y la bolsa
Pese a lo dicho anteriormente, lo cierto es que la bolsa o el mercado de valores no debería tomarse en ningún caso como un juego de azar más. La dinámica de las personas que se dedican profesionalmente a la inversión esconde un amplio estudio detrás.
Es decir, para hacer una inversión, los expertos analizan concienzudamente el estado de los mercados, las posibilidades de crecimiento de una compañía y muchos más datos que podrían hacer escapar de la bolsa a cualquiera que no fuese un experto.
Aquí es donde se encuentra la principal diferencia entre el juego y la inversión. La bolsa no debería ser nunca entendida como un inmenso casino que puede deparar enormes ganancias en segundos.
Normalmente, la inversión en bolsa solo da rendimientos si se valora a largo plazo y ha existido previamente un estudio completo de lo que se va a hacer. Esto no sucede en ningún juego de casino. Sí que puedes prepararte una estrategia para jugar o confiar en la estadística y la probabilidad para aumentar tus posibilidades de ganancia, pero, por mucho que estudies, el juego es azar.
El azar y la bolsa
Entonces, ¿la bolsa es pura matemática y la suerte no tiene nada que decir al respecto? Nada más lejos de la realidad. Cualquier profesional de las finanzas te dirá que en la bolsa la suerte también juega un papel fundamental.
No son raros los casos de acciones que multiplican su valor en un suspiro para después volver a hundirse recuperando valores normales. A veces estas situaciones se producen por rumores de cualquier tipo, por lo que un inversor despistado podría dar la campanada por una mera cuestión de suerte.
Sin embargo, no es ni muchísimo menos lo normal. Se podría decir que estos golpes de suerte son la excepción que confirma la regla de que los mercados de valores tienen más que ver con la profesionalidad de los inversores que con su suerte.
Con todo, es imposible concluir que invertir en la bolsa sea como un juego cualquiera de casino online. Sí, la suerte tiene algo que ver, pero es el estudio matemático de los mercados lo que verdaderamente propicia que el inversor gane o pierda a largo plazo o que sus inversiones tengan más o menos posibilidades de ser exitosas.
No lo olvides, el juego de azar es una forma más de divertirse, un pasatiempo momentáneo que sirve para desconectar y disfrutar, pero no es una forma de inversión profesional como sí lo es el mercado de valores.